Si todo poema es un mundo aparte, si la poesía se trata antes que nada de inventar una

lengua dentro de la lengua, podemos leer esta antología como un conglomerado de

mundos singulares, cada uno con su textura y color propios. Aunque también existe la posibilidad de acercarse a este libro como si fuera una sola canción cantada al unísono por un coro de catorce voces, un hit radial que nos hace bailar con desenfreno para sumirnos repentinamente en el éxtasis raro de la meditación o la duda. Desde distintos puntos del planeta, lxs poetas sub-27 que componen esta selección dialogan entre sí en un español dislocado para revelar un deseo prolífico de transmutación -transformar los espacios, las rutinas, los vínculos, las identidades-, recordándonos que la poesía es siempre una interminable conversación que tiene lugar dentro y fuera del territorio y que todo poeta modula a su manera la música incomprensible de la utopía.